¡Sé Tú Mismo: El Vuelo Que Te Pertenece!

¡Bee yourself! Qué frase tan simple, ¿verdad? Pero en esta era digital, donde todo se muestra y se compara, ser uno mismo parece un arte que no todos dominan. La verdad es que hay mucho que superar en el camino. Tenemos que lidiar con traumas que nos pesan, tabúes que nos limitan, y esa persistente idea de que "merecemos" algo que la vida parece no querer darnos.

Nos dicen que somos libres de hacer lo que queramos, pero siempre hay una condición, ¿no crees? Es como si el "sé tú mismo" se hubiera vuelto algo tan grande que hasta tiene sus propios límites. ¡No vaya a ser que termines ofendiendo tu propia opinión, la que creías que era tuya pero que quizás te dictaron!

Para mí, ser tú mismo es como esos momentos en los que estás a solas con tu yo interior. Es cuando puedes disfrutar de tu propia compañía sin la necesidad de aparentar nada. Sin tener que creer que todo debe ser como los demás quieren para que piensen que eres tú mismo. Es un respiro, una liberación.

Piensa en ese abejorro. Él está ahí, haciendo su trabajo, el que debe hacer, sin que nadie de su especie lo esté mirando. Sabe lo que tiene que hacer, es su propósito. ¿Y quiénes somos nosotros para decirle si está haciendo lo correcto o no? Él está donde quiere estar porque es el lugar donde, por generaciones, aprendió a ser quien es. Es su esencia.

Ahora, aquí viene la parte crucial: la responsabilidad de ser tú mismo. No es solo un derecho, es un compromiso contigo. No es ir por ahí sin rumbo, sino entender que ese "tú" auténtico tiene un propósito y un lugar en el mundo. Es la responsabilidad de conocerte, de aceptarte tal cual eres, y de vivir de una forma que sea verdadera para ti. Es el camino para florecer de verdad.

¿Qué te parece? ¿Resuena contigo esta versión?

-ZuniReds