Detente, Respira y Vive el Presente.
Me he dado cuenta de algo fundamental en mi propia vida, algo que a menudo pasamos por alto en este mundo tan acelerado. Correr siempre, sin aprender a respirar, nos va matando lentamente. Es una verdad que resuena conmigo profundamente.
Constantemente me encontraba persiguiendo metas, cumpliendo plazos y, en ese afán, olvidaba algo tan vital como respirar correctamente.
Pero un día, me di cuenta de la importancia de parar. Me dije a mí misma:
"Para un momento🛑✋, respira profundo 👃🫁 y mientras exhalas 👄🌬️ recuerda que este diminuto instante debe de repetirse con más frecuencia en tu día a día."
Y déjenme decirles, esa pequeña pausa ha tenido un cambió muy significativo para mí.
El Poder de Mi Propia Respiración
Mi respiración, que antes era solo un acto automático, se convirtió en una herramienta poderosa. Empecé a usarla para:
•Reducir el estrés: Al respirar profundamente, siento cómo mi sistema nervioso **parasimpático se activa, trayendo una calma que antes no conocía. Es como si mi cuerpo y mi mente se relajaran por fin.
• Mejorar la concentración: Cuando te tomas el tiempo para respirar conscientemente, sentirás que tu cerebro se oxigena mejor. Esto te da una claridad mental y una capacidad de enfoque que te ayuda a ser una persona más productiva.
• Aumenta la energía: Notarás que, al respirar de forma más eficiente, tu cuerpo utiliza el oxígeno de manera más efectiva, y esto se traduce en una vitalidad que te acompañará durante todo el día.
• Conectarte con el presente: Enforcarse en la respiración crea un ancla en el aquí y el ahora. Te libera de las preocupaciones del pasado o la ansiedad por el futuro, y simplemente disfrutaras de este breve momento en el presente.
Así que, ahora, cuando te sientas abrumada o abrumado, detente. Regálate ese diminuto instante. Cierro los ojos, inhala profundamente por la nariz, siento cómo tú abdomen se expande y, al exhalar lentamente por la boca, permite que toda la tensión se disipe. Este momento de respiración que se forme un hábito importante en tu jornada diaria, y créanme, tú cuerpo sentirá bienestar al igual que tú mente y tu mismo te lo agradecerás infinitamente.
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El sistema parasimpático es una de las dos divisiones principales del sistema nervioso autónomo (o neurovegetativo), el cual se encarga de regular las funciones involuntarias e inconscientes de nuestro cuerpo, como la frecuencia cardíaca, la digestión, la respiración, etc.
Se le conoce popularmente como el sistema de "descanso y digestión" o "restaurar y mantener", ya que sus funciones están orientadas a devolver al cuerpo a un estado de calma y conservación de energía después de una situación de estrés, o durante periodos de tranquilidad.
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¿Te has dado cuenta de cómo una simple pausa para respirar puede cambiar tu día?
-ZuniReds
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